Los limpiaparabrisas nunca ganarán un premio por su excelencia. Nadie ha visto un auto chévere pasar en frente y pensar “Wow. Qué chidos esos limpiaparabrisas”. Y aceptémoslo- ninguno de nosotros hemos pensado en cambiarlos hasta que empiece a nevar y llover. Pero ese es el peor momento para reconocer que tenemos unos limpiadores que dejan manchas que nos obstruyen la visibilidad.
Es buena idea reemplazar los limpiadores cada seis meses a cada año. Y aunque ya lo hayas hecho varias veces, un repaso no caería mal. Los limpiadores más comunes son los que se conectan como enganches. Las instrucciones para cambiarlos están aquí abajo. Si quieres saber cómo cambiar limpiadores tipo clavija, dale clic aquí.
La cualidad más importante es el tamaño. Asegúrate de medir ambos limpiadores del lado del pasajero y conductor porque a veces son de diferentes tamaños. También puedes buscar el tamaño correcto yendo al sitio web de tiendas automotrices e introduciendo el año, marca y modelo de tu auto.
Es buena idea cambiar los dos limpiadores a la vez. Aún si solamente uno te parece desgastado, existe la posibilidad de que no le falte mucho tiempo al otro.
Aparta los brazos de los limpiadores del auto. Unos solo podrán elevarse unas dos o tres pulgadas desde el parabrisas. Si sucede esto, no tires más. Intenta encender el motor y activar los limpiadores y después apagar el motor a mitad para que los limpiadores queden a medias.
Cuando el brazo del limpiador quede perpendicular al parabrisas, busca una pestaña de bloqueo para mantenerlo en su sitio. Debería de estar en la base del limpiador. No quieres que el gancho metálico le pegue al parabrisas cuando estés cambiando el brazo.
Rota el limpiador de manera perpendicular al brazo. Encontrarás una pestaña que fija el limpiador al brazo. Tíralo o presiónalo para soltar el enganche. Cuando se suelte, empuja el limpiador hacia el brazo. Después puedes deslizar el limpiador del hueco del gancho.
Empieza con el limpiador perpendicular al brazo. Introduce el gancho del brazo a través del hueco y alrededor del limpiador. Tira de manera firme el limpiador hasta que escuches un clic. Retira la traba que mantiene el brazo vertical y lentamente baja el brazo. Hazle una prueba a los limpiadores para asegurarte que estén seguros. Un ultimo consejo- dale un lavado a tu parabrisas cada vez que le eches gasolina a tu auto. El restregar todos los insectos muertos y otros residuos le da a tus limpiaparabrisas un descanso y durarán más.
Con una visión clara en cualquier condición, ahora puedes volver a las calles y disfrutarlas más.
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